QUIENES SOMOS?

H.I.J.O.S. (Hijos e Hijas por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio) es una agrupacion creada en 1.995, a partir de la necesidad de juntarnos, reconociendonos en las historias comúnes, reivindicar la lucha de nuestros padres y sus compañeros, buscar a nuestros hermanos apropiados, luchar contra la impunidad. A más de 15 años seguimos luchando por la cárcel común, perpetua y efectiva para todos los genocidas de la última dictadura militar, sus cómplices, instigadores y beneficiarios.

domingo, 28 de febrero de 2010

RESUMEN 2da SEMANA JUICIO A LOS GENOCIDAS

TESTIMONIOS JUEVES 25:
Juan Martin, “Cuando Bussi visitaba los campos de concentración era como el ogro. No tenía demasiado contacto con los prisioneros, pero cuando lo tenía era para golpearlos y torturarlos él mismo”, contó hoy el testigo y sobreviviente Juan Martín frente al Tribunal Oral Federal. Luego, recordó que en un solo caso pudo ver al represor Antonio Domingo Bussi torturar a un prisionero. “A Bussi lo vi puntualmente meterse donde lo tenían a un joven que trajeron de Buenos Aires al campo de concentración de Nueva Baviera. Allí lo torturaron y Bussi ordenó que le pusieran una chapa metálica encima para que sienta más la tortura con picana”, relató. El testigo, quien permaneció detenido entre el 12 de agosto de 1976 y septiembre de 1978 (cuando fue liberado y autorizado a irse a España), pasó por varios centros clandestinos de detención y confirmó que vio a varias víctimas que fueron torturadas y asesinadas en esos lugares.

Martín dio un testimonio de 5 horas en el que relató de manera pormenorizada el funcionamiento de los CCD La Jefatura, Nueva Baviera y Arsenales. Describió cómo funcionaba el circuito represivo: en Nueva Baviera había un grupo operativo, que realizaba los secuestros, que pertenecía a la Policía de Tucumán al mando de un grupo de Comando de militares al mando de Arrechea, este era un CCD de paso. En el Arsenal, en cambio, no había policías sino militares y gendarmeria. En Jefatura habia un Supervisor Militar que dirigía el SIC (Servicio de Información Confidencial) que a su vez se encontraba al mando de Albornoz.

Martín relató como tuvo oportunidad de ver listados efectuados por el Departamento de Inteligencia (D2) en el que constaba enorme cantidad de nombres, al lado de estos decía cual era su destino, existían 3 opciones:"LIBERADO", "PEN" -que significaba que habia sido blaqueados y puestos a disposición del poder ejecutivo nacional en alguna institución carcelaria del país-, y "DF" que significa disposición final, esta era la orden para la muerte. "En Jefatura había distintos órganos de inteligencia que decidían sobre el destino final de los detenidos, esas decisiones las tomaban la Comunidad Informativa, dirigida por Cattáneo (D2)", específico Martin.

Relató como los "traslados" se hacían de noche en un camión que tenía la macabra inscripción "Transporte Higiénico de Carnes", las personas eran trasladadas vendadas y atadas, y muchas veces escuchó decir que eran llevadas al "pozo". En el pabellón donde los tenían a los secuestrados "había olor a mugre, olor a miedo, gente gritando..."

Contó como el SIC poseía una estructura bien aceitada de secuestradores, torturadores, administrativos, vigilantes, y hasta de un médico, el Dr. Galdeano, encargado de verificar en qué condiciones se encontraban los prisioneros para saber si podían seguir torturándolos.

Las casas de los compañeros que mataban o que secuestraban eran tomadas como botín de guerra, como así también los muebles, electrodomésticos, ropa y demás objetos que saqueaban, eran llevados a un depósito dentro de Jefatura, incluso, relató, que se vendían entre ellos mismos lo que habían robado de las casas. A quienes les eran entregadas las casas y los autos robados a los desaparecidos era una decisión del personal jerárquico de la 5ta brigada.

"Pese a las condiciones, uno permanentemente se estaba comunicando con el resto, aún en la peor condición. Una de las cosas que hacíamos, era tratar de pasarnos toda la información posible, de quienes habían caído, quienes habían trasladado", además en el período julio-agosto del 77, entró muchas veces a la zona de los calabozos colectivos para repartir comida, para limpiar y así puedo ver gente y saber de otros a los que no vio pero le contaron. "Pude sobrevivir para poder contar todo esto, todo lo que viví y pasó".


Holmquist, relató cómo fue secuestrado en 2 oportunidades, la primera vez en noviembre de 1975 -permaneció secuestrado alrededor de 18 días- fue secuestrado de su casa, torturado, le hicieron un simulacro de fusilamiento, hubo un médico que lo controlaba para que no se muera durante las sesiones de tortura. Logro saber que estuvo en Jefatura y luego fue llevado a la "Escuelita" de Famaillá, cuándo lo liberaron le dijeron que diga que fue secuestrado por un comando montonero y liberado por el ejército. El 29 de Mayo de 1976 es secuestrado por 2da vez de la vía pública, minutos después lo secuestran de la casa materna a su hermano. Es llevado nuevamente a Jefatura donde lo torturan junto a su hermano. Su madre pudo identificar que al mando de los secuestradores se encontraba Albornoz y un policía de apellido Alvarez - vecino de ellos-. A unos días de ser secuestrado lo sueltan y le dicen que a su hermano no lo va a ver más, Holmquist continúa detenido-desaparecido.

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Una ley operativa es necesaria

Por María Julia Albarracín

En el avance de las causas por delitos de Lesa Humanidad cometidos durante la última dictadura militar persiste la necesidad de garantizar la protección de testigos, querellantes, abogados y militantes de organizaciones sociales. En este camino desaparecieron Julio López, hecho aberrante que tuvo la clara intención de amedrentarnos. Esto adquirió la atención de la clase política, que recurre al intento de adaptar la "Ley Nacional 25.764", denominada "Programa de Protección a testigos e imputados", creada para garantizar la seguridad de testigos de delitos vinculados al crimen organizado y al narcotráfico. Esta es la ley que se viene aplicando a personas que guardan en sus testimonios historias de lucha por reconstruir la memoria de todos los argentinos, quienes no tienen intención de ocultarse ante las amenazas, son víctimas pero no han sucumbido.

Tucumán, sancionó en 2.006 la ley 7.860, que crea el "Departamento de Protección de Testigos" en el ámbito del Poder Ejecutivo. Es una norma general que está a la espera de ser reglamentada por el Gobernador y de una partida presupuestaria que la ponga en marcha.

El panorama es complejo y la ley no ha sido el marco para resolver situacions de amenazas enTucumán, sin embargo la ausencia legal no nos ha detenido en la marcha de este juicio que se avecina, lo que es una gran ,muestra de fortaleza, de esperanza y el resultado de la perseverancia en la búsqueda por la verdad, el juicio y el castigo.



JUICIO Y CASTIGO

Contamos con un area de Legales, Investigacion y Comunicacion que se avoca exclusivamente al trabajo de enjuiciar a los represores. Investigamos para construir la verdad historia y aportar pruebas judiciales que nos permitan condenar a los imputados de los delitos de lesa humanidad en nuestra provincia. En este trabajo confluyen dos lineamientos generales de la organización: la reconstrucción histórica y el juicio y castigo. Entendemos que estos comlejos procesos judiciales deben ser acompañados de una fuente política de comunicación, para lo cual trabajamos elaborando distintos productos y propuestas. Si querés contactarte con nosotros para aportar información o realizar alguna consulta vinculada con estos trabajos escribinos a: hijostucuman@yahoo.com